Convivencia y posconflicto en Colombia
Abstract
Construir una paz estable y duradera en Colombia significa realizar inversiones públicas y privadas en los territorios más afectados por la violencia para construir infraestructuras de calidad, prestar servicios sociales eficaces, conformar economías legales que no deterioren los recursos naturales y generen de forma continua ingresos suficientes para campesinos y trabajadores pobres. Significa, además, restituir los derechos de las víctimas del conflicto, garantizar la participación política y la seguridad de los exguerrilleros, conformar justicias -transicional y ordinaria- ágiles, oportunas, creíbles, forjar un amplio acuerdo político nacional, sofocar la corrupción pública y civil. Y significa también, especialmente para que sea una paz perdurable, consolidar cambios culturales que hagan anidar el respeto y la concordia en la mente y el alma de los colombianos, dando lugar a una nueva forma de ser y de relacionarnos signada por el tolerar en la diversidad.